El papa saludó a los fieles desde el papamóvil acompañado por la música de la Banda di Galati Mamertino, una localidad italiana.
En su discurso, el papa explicó la importancia de las virtudes teologales para la vida del cristiano. Dijo que la fe, esperanza y caridad son dones del Espíritu Santo que actúa como un “maestro interior”.
FRANCISCO
El cristiano nunca está solo. Obra el bien no por un esfuerzo titánico de empeño personal, sino porque, como humilde discípulo, camina detrás del Maestro Jesús. Él va por delante en el camino. Las virtudes teologales son el gran antídoto a la autosuficiencia.
Al finalizar su discurso, el papa improvisó unas palabras sobre una situación que le preocupa mucho.
FRANCISCO
Rezamos por la martirizada Ucrania, que sufre tanto, tanto. Jóvenes soldados van a la batalla a morir. Rezamos y pedimos también por Oriente Medio, por Gaza, que sufre tanto en la guerra, por la paz entre Palestina e Israel, para que sean dos estados libres y con buenas relaciones.
Francisco se despidió de los fieles con una bendición.
PA