Era el primer viaje de Francisco tras la operación de junio. Y dijo que se siente perfectamente.
FRANCISCO
Mi salud va bien. Me quitaron los puntos. Llevo una vida normal. Tengo una faja que la debo llevar puesta por dos o tres meses.
Lo dijo a la prensa, volviendo de Lisboa, donde también negó que sus continuas improvisaciones en los discursos se debieran a problemas de vista. Dijo que no leyó buena parte de ellos por motivos pastorales.
También se habló de abusos a menores. En Portugal un informe realizado a petición de los obispos reveló en febrero que casi 5.000 niños fueron víctimas de sacerdotes o religiosos desde 1950.
El papa se mostró satisfecho por el informe y por el trabajo de transparencia hecho por los obispos portugueses, aunque cree que hubo medios que agrandaron el problema.
FRANCISCO
El proceso va bien, estoy notificado de cómo van las cosas, por ahí las noticias lo agrandaron. Pero la cosa está andando bien.
En Lisboa Francisco repitió en varias ocasiones que la Iglesia debe ser un lugar abierto a todos. Los periodistas le preguntaron si eso es compatible con que haya personas a las que se les niega el sacramento. Por ejemplo: a las mujeres que no pueden ordenarse sacerdotes o a las personas homosexuales que no viven la castidad.
FRANCISCO
Esto no quiere decir que (la Iglesia) sea cerrada. Cada uno encuentra a Dios recorriendo su propio camino dentro de la Iglesia y la Iglesia es madre y guía a cada uno por su camino.
El papa habló de su visita a Fátima. Dijo que rezó por la paz.
El próximo viaje será a Mongolia. Y el siguiente a Marsella, en Francia, para participar en los encuentros de obispos del Mediterráneo. Dijo que está muy preocupado por lo que sufren los migrantes y refugiados que cruzan África primero y luego, si sobreviven, el mar, para llegar a Europa.
JRB
