La Santa Sede y la República Socialista de Vietnam avanzan en sus relaciones diplomáticas. Poco más de una semana después de viajar al Vaticano para encontrarse con Francisco, el presidente vietnamita, Vo Van Thuang, visitaba la Conferencia Episcopal del país.
Así informó el gobierno a través de su página web. El comité gubernamental vietnamita para asuntos religiosos y el presidente de Vietnam destacaron la gran labor de la Iglesia para el desarrollo socioeconómico del país.
Informaron a los obispos sobre el contenido de su reunión con el papa y con el secretario de Estado, el cardenal Pietro Parolin, el pasado 27 de julio, de la que salió un acuerdo histórico. Por primera vez, Vietnam contará con un representante pontificio residente en el país.
Esto quiere decir que, hasta ahora, la persona designada por la Santa Sede para las relaciones diplomáticas con Vietnam era el nuncio en Singapur. Esto se traduce en que, al no residir en Vietnam, debía pedir autorización al gobierno para poder visitar el país.
Este acuerdo podría ser un precedente en los pasos que está marcando la Santa Sede con China, aunque salvando las distancias. Ambos son repúblicas socialistas en las que la Iglesia ha tenido grandes dificultades en cuanto a libertad religiosa.
CA