La audiencia general ha vuelto a celebrarse después de la pausa de julio, pero esta vez no en la plaza de San Pedro sino en el Aula Paolo VI, a causa del fuerte calor en Roma. No cabía un alfiler y los peregrinos recibieron así al Papa.
Francisco repasó su reciente viaje a Polonia y compartió lo aprendido. Habló de las pruebas de fraternidad que dieron los jóvenes de todo el mundo en la JMJ y aseguró que en este viaje ha encontrado 'la respuesta de un mundo que está en guerraâ?.
FRANCISCO
'Han dado una respuesta al desafío de hoy. Han dado un signo de esperanza y este signo se llama fraternidad. Porque en este mundo en guerra, es necesaria la fraternidad, es necesaria la cercanía, es necesario el diálogo, la amistad. Y esta es la señal de la esperanza: Cuando hay fraternidadâ?.
Halagó el esfuerzo de los asistentes tanto de la JMJ como de la Audiencia, que siendo de países tan diferentes encuentran la forma de entenderse.
Recordó su oración en el santuario de la Virgen de Czestochowa, la patrona de Polonia y explicó que ahí comprendió de dónde proviene la fuerza de la fe de los polacos y envió este mensaje.
FRANCISCO
'Polonia recuerda hoy a toda Europa que no puede existir futuro para el continente sin sus valores fundamentales, los cuales a su vez, están al centro de la visión cristiana del hombreâ?.
También rememoró su silencio en Auschwitz, donde rezó por todas las personas que perdieron su vida allí.
FRANCISCO
'En ese silencio he escuchado, he sentido la presencia de todas las almas que pasaron por allí; he sentido la compasión, la misericordia de Dios, que algunas almas santas supieron también llevar en aquel abismoâ?.
Dijo que esta visita además le ha permitido comprender el valor de la memoria, no como recuerdo sino como advertencia para que odio y violencia no se repitan.
El Papa recordó a Susana, la joven romana fallecida de meningitis mientras regresaba de Cracovia, después de la JMJ.
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