Yemen es el país más pobre de Oriente Medio y la guerra civil que lo ha sumido en el caos es uno de los conflictos olvidados que el Papa incluyó en su último discurso de Navidad.
La guerra civil lleva años gestándose pero en marzo de 2015 se desató por completo. Yemen está dividido en dos facciones. El norte, en manos de los rebeldes chiíes, a los que podría estar ayudando Irán, y el sur, controlado por el gobierno y apoyado por la coalición liderada por Arabia Saudí.
La inseguridad ha facilitado la entrada de terroristas del ISIS o Al Qaeda, sobre quienes caen las principales sospechas de los atentados contra religiosos. En el pasado mes de septiembre, en Adén, fue incendiada la última iglesia católica del país.
La matanza de las 4 misioneras de la congregación fundada por Madre Teresa y otras 12 personas en un asilo ha sido el último de los muchos crímenes perpetrados en este conflicto cuya autoría no es clara.
Desde la ONU señalan que la coalición liderada por Arabia Saudí podría ser responsable de muchos de los ataques a civiles cometidos desde el aire.
RUPERT COLVILLE
Comisión de Derechos Humanos de la ONU
'Las bajas civiles continúan aumentando en Yemen. En febrero fueron asesinados 168 civiles y 193 heridos. Aproximadamente las dos terceras partes de ellos a causa de los ataques aéreos de la coaliciónâ?.
La coalición liderada por Arabia Saudí, sin embargo, ha negado la autoría de esos ataques a civiles. Su representante en la ONU ha señalado que los casos en los que se han podido cometer errores se están investigando.
ABDALLAH AL-MOUALLIMI
Representante de Arabia Saudí en la ONU
'Todo el que diga que la coalición ataca deliberadamente objetivos civiles, incluyendo hospitales o escuelas está completamente equivocado. Es completamente equivocadoâ?.
Se calcula que la guerra ha provocado más de un millón de desplazados y más de 9.000 fallecidos. A esto hay que sumarle la terrible crisis alimentaria que afecta a al menos 15 millones de personas.
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