El encuentro de Francisco con el primer ministro de Granada fue cálido desde el principio.
En una reunión a puerta cerrada, el Papa y Keith Mitchell hablaron sobre la ayuda que la Iglesia católica presta en esta isla del Caribe, sobre todo en educación y servicios sociales.
Mitchell presentó al Papa a su mujer y a su hijo. También les acompañaba su madre.
'Encantada de conocerle.â?
Francisco entregó al primer ministro granadino un ejemplar de su exhortanción apostólica 'Evangelii Gaudium'.
Después, dio rosarios a toda su familia.
'Rece por mí.â?
La isla de Granada roza los 110.000 habitantes, de los que aproximadamente la mitad son católicos.
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