Egipto fue uno de los países donde se desató la llamada 'primavera árabeâ? de 2011. Sin embargo, en lugar de democracia se saldó con inestabilidad y violencia. Una situación que afectó especialmente a los cristianos.
IBRAHIM ISAAC SIDRAK
Patriarca Copto-católico Egipto
'Somos cristianos y somos egipcios. Sufrimos los mismos problemas económicos, sociales, de seguridad y tantos otros. Pero siempre hemos pagado el precio de ser cristianos debido a la ignorancia y a la pobreza que alimentan los fundamentalismos. Por eso, de vez en cuando, nos toca pagar un precioâ?.
Ese precio se tradujo en una ola de violencia que provocó la quema de iglesias, asesinatos y persecución. El patriarca Sidrak dice que, poco a poco la intolerancia está despareciendo.
Egipto tiene mejor suerte que otros países de Oriente Medio donde los yihadistas del Estado Islámico continúan sembrando el terror. El islamismo radical también ensombreció el futuro de Egipto pero los propios egipcios lo rechazaron.
IBRAHIM ISAAC SIDRAK
Patriarca Copto-católico Egipto
'Tenemos ahora un presidente y un gobierno mejores. Tampoco nos amenaza el Estado Islámico porque los propios musulmanes han descubierto el fracaso de este sistema político islámicoâ?.
Sin embargo en países como Irak o Siria las ideas sectarias de estos radicales sí han calado entre muchos musulmanes. El patriarca asegura que una intervención internacional no violenta podría frenarlos.
IBRAHIM ISAAC SIDRAK
Patriarca Copto-católico Egipto
'La violencia conduce a la violencia. Quizá podemos aceptar una intervención para pararlos pero no será una solución. Creo que los que tienen la decisión o la posibilidad de hacerlo pueden pararlos incluso sin recurrir a la guerraâ?.
Pero al mismo tiempo, el patriarca pide a la comunidad internacional que si interviene, actúe con responsabilidad, no movida por otros intereses. Pone como ejemplo Irak, donde lo que iba a ser la solución para terminar con una dictadura ha supuesto, en realidad, la desintegración del país.
AC
RR
-JM
-PR
Up: CA