El Papa se detuvo con muchos peregrinos antes de comenzar la audiencia general.
Esta mujer se emocionó cuando contó a Francisco la situación que está atravesando.
Estos argentinos le prepararon un auténtico mate.
Y este niño, le hizo reír.
En su catequesis, explicó que Dios quiere que las personas sean felices, y que no es cristiano despreciar la vida ahora y aspirar sólo a la vida eterna.
Pidió no caer en la tentación del pesimismo ante los problemas de la vida cotidiana y de la sociedad, porque Dios siempre ayuda a las personas.
FRANCISCO
“He saludado a algunas personas de Barcelona: cuántas noticias tristes de allí... He saludado a muchos del Congo, ¡y cuántas noticias tristes de allí, por citar sólo algunas”. FLASH “Siempre hay problemas: los chismes, las guerras, las enfermedades, los problemas... Pero el buen grano crece. Y al final el mal será eliminado”.
El Papa aseguró que hay dos actitudes en la vida: ser personas de primavera, que viven esperando el fruto, o ser personas de otoño, grises porque viven en la nostalgia de mirar sólo hojas secas.
FRANCISCO
“Algunos piensan que la vida limite la felicidad a la juventud, al pasado, y que la vida sea un lento decaimiento”. FLASH “No nos limitemos a nostalgias, excusas, quejas: sabemos que Dios nos quiere herederos de una promesa e incansables cultivadores de sueños”.
La sorpresa del encuentro fue este coro español que gustó mucho al Papa.
FRANCISCO
“Yo pensaba que en la Universidad de Salamanca les enseñaban a estudiar con los libros, pero cantan bien, felicitaciones”.
Antes de marcharse el Papa recordó a los damnificados por el terremoto en la isla italiana de Isquia, que ha provocado dos muertos y ha dejado sin casa a unas 2.600 personas.