Benedicto XVI publica un estudio sobre los abusos sexuales

 | 
11/04/2019
Descargar documento
Compartir

Benedicto XVI ha publicado un interesante ensayo sobre las raíces de los abusos en la Iglesia. Es su aportación al encuentro en febrero del Papa con presidentes de conferencias episcopales para afrontar la crisis de los abusos. Por eso, explica que ha pedido permiso a Francisco antes de publicarlo. 

El Papa emérito se remonta a la Revolución del 68, y recuerda que una de las libertades que este movimiento quería conquistar para la sociedad era la “completa libertad sexual, que no toleraba ninguna norma”. Así, por ejemplo, la pedofilia era permitida y considerada incluso conveniente. 

En paralelo, explica que colapsó la Teología Moral católica, pues se negó a reconocer una ley natural que mostrara que hay cosas que siempre y en cualquier caso son un mal, aunque se hagan por un fin bueno. 

Recuerda, por ejemplo, la dura reacción a la encíclica de Juan Pablo II “Veritatis Splendor”, pues decía que hay acciones que nunca pueden convertirse en buenas. 

Benedicto lamenta que en los años 60 aparecieron en algunos seminarios “club homosexuales que actuaban más o menos abiertamente y transformaron el clima de los seminarios”. También le duele que “en muchos seminarios, el modo de ser “conciliar” se entendió en la práctica como ser críticos o negativos con la tradición existente hasta ese momento”.

En paralelo, explica que el Derecho Canónico era entonces muy garantista hacia los sacerdotes acusados de abusos, en vez de defender la fe de la Iglesia. Por eso, Juan Pablo II decidió que los procesos contra sacerdotes abusadores se realizaran en la Congregación para la Doctrina de la Fe, y no en la del Clero. 

Benedicto se pregunta cómo se ha difundido el mal de los abusos en la Iglesia, y lamenta que “en último término, el motivo está en prescindir de Dios. También los cristianos y los sacerdotes preferimos no hablar de Dios porque nos parece un discurso sin utilidad práctica”. 

Su propuesta es “comenzar nosotros mismos a vivir de Dios”. Propone por ejemplo cuidar mejor la Eucaristía. Dice que le preocupa cómo viene tratada, “reducida a gesto ceremonial cuando el sacerdote piensa que la buena educación le obligue a distribuirla a todos los que van a una boda o a un funeral”, aunque no estén preparados.

Asegura que “la crisis causada por los muchos casos de abusos cometidos por sacerdotes lleva a muchos a considerar a la Iglesia como algo hecho mal que hay que rehacer de nuevo”. Pero, responde él mismo, “una Iglesia construida por nosotros no representa ninguna esperanza”. 

“La idea de una Iglesia mejor hecha por nosotros es una propuesta del diablo para alejarnos de Dios”, escribe.

Explica que “también hoy en la Iglesia hay muchas personas que humildemente creen, sufren y aman, y en los que se muestra el verdadero Dios, el Dios que ama”, y que “es pereza del corazón no querer darse cuenta de ellos”. 

Benedicto termina dando las gracias al Papa Francisco “por todo lo que hace para mostrarnos continuamente la luz de Dios, que tampoco hoy se ha eclipsado”. 

----

 ‘Benedicto XVI, en honor a la verdad ’ recuerda la trayectoria personal de Joseph Ratzinger. Desde sus orígenes en Baviera, hasta su llegada al pontificado, pasando por su directa colaboración con San Juan Pablo II.
Puedes ver el documental aquí  

Noticias relacionadas
1 2 3 9
Anuncio en el que salen 3 ordenadores marca Medion y algunas especificaciones
Lo + visto
SÍGUENOS EN
Suscríbete a nuestra newsletter
magnifier