Francisco se reunió con los más de 200 participantes de un congreso organizado por la Compañía de Jesús.
Se trata del encuentro “Un camino de justicia y reconciliación”. Fue organizado para celebrar los 50 años de la fundación del organismo encargado de coordinar e impulsar su apostolado social, el Secretariado para la Justicia Social y la Ecología.
El Superior General de la compañía, Arturo Sosa dirigió unas palabras al Papa al inicio de la reunión.
“Lo más importante de este congreso es ver con claridad los caminos a recorrer en el futuro inmediato en el mediano y largo plazo”.
Francisco pronunció un largo discurso en español donde repitió que el mundo está en una situación crítica a nivel social.
FRANCISCO
Subsiste la trata de personas, abundan las expresiones de xenofobia y la búsqueda egoísta del interés nacional, la desigualdad entre países y en el interior de los mismos crece sin que se encuentre remedio. Con una progresión yo diría geométrica.
El Papa recordó que el mundo está en una III Guerra Mundial a pedazos y que es necesario un cambio radical de mentalidad para fomentar el diálogo.
FRANCISCO
Necesitamos una verdadera «revolución cultural», una transformación de nuestra mirada colectiva, de nuestras actitudes, de nuestros modos de percibirnos y de situarnos ante el mundo.
El Papa terminó su intervención recordando un mensaje del Padre Arrupe, el superior de los jesuitas que instituyó el Secretariado para la Justicia Social y la Ecología. Les dijo que como jesuitas no dejen la oración, instrumento imprescindible para su misión evangelizadora.
Javier Romero