Acaba de concluir la fase local del proceso de beatificación de Chiara Lubich, la fundadora del Movimiento de los Focolares.
El obispo de la diócesis en la que falleció hace 11 años dio por concluida la investigación de sus escritos y la recopilación de testimonios tanto a favor y como en contra de la declaración de santidad.
Ahora los documentos se envían al Vaticano, que los estudiará y decidirá si proponer al Papa que reconozca oficialmente que Chiara Lubich vivió heroicamente las virtudes cristianas.
RAFFAELLO MARTINELLI
Obispo de Frascati
“Queremos ofrecer todos los elementos que hemos adquirido, documentándolos con seriedad y poniéndolos a disposición de quienes tienen que valorarlos y tomar una decisión”.
MONS. ANGELO AMATI
Delegado Episcopal del Tribunal Diocesano
“La investigación ha cubierto la vida, virtudes, carisma y espiritualidad específica de Chiara Lubich, junto con los temas teológicos presentados, como la unidad, Jesús abandonado, Jesús en medio; y también sobre la fundación de la Obra de María, y los contactos interconfesionales e interreligiosos”.
MARIA VOCE
Presidenta del Movimiento de los Focolares
“Nos alegra saber que ahora la Iglesia estudiará y valorará la vida y virtudes de la sierva de Dios, nuestra querida Chiara. Esperaremos con espíritu de humildad el juicio del Santo Padre y pedimos a Dios, sólo por su gloria y por el bien de muchos que, con el posible reconocimiento de la ejemplaridad de Chiara, la humanidad y la historia vivan nuevos pasos de paz, unidad y la fraternidad universal”.
Al Vaticano le espera un gran trabajo porque como se ve, recopilaron muchísimo material.
Chiara Lubich tuvo un papel crucial en la Iglesia católica del S.XX. Fundó en 1943 los Focolares.
La II Guerra Mundial estaba consumiendo vidas, y ella percibió que la fraternidad es capaz de superar cualquier mal. Lo llamaba la “espiritualidad de la unidad”.
ROME REPORTS pudo hablar con ella en una de sus últimas apariciones públicas, durante la apertura del proceso de beatificación del cofundador de los Focolares, Igino Giordani.
6 de junio de 2004
“¿Qué significa este momento? Una gran alegría. Cuando supe que habrían hecho este proceso, me conmoví. Es quizá una de las mayores alegrías de mi vida, de las más bellas'
¿Cuál fue su mayor virtud, la mejor...?
¿La principal virtud que vi en él? El amor. Amar a Dios y amar al prójimo”.
Chiara Lubich falleció en Rocca di Papa, cerca de Roma, en el año 2008.
Su vida inspira a millones de personas que participan de su espiritualidad en 182 países de todo el mundo.
Javier Martínez-Brocal
