Ante la obligación de celebrar Misa a puerta cerrada en Italia y el Vaticano, el Papa decidió que la ceremonia se retransmitiera en directo para que participaran no solo unos pocos sino todo el mundo. La ofreció por las víctimas del coronavirus.
FRANCISCO
En estos días ofreceré la Misa por los enfermos de esta epidemia de coronavirus, por los médicos, los enfermeros, los voluntarios que ayudan mucho, los familiares.
Junto a él había unos pocos colaboradores. Durante la homilía reflexionó sobre la confesión y la humildad que se necesita para acudir al sacramento de la penitencia.
FRANCISCO
Ir a confesarse no es solo enumerar al sacerdote esta lista (de pecados): 'hice esto, esto, esto, esto...'. Y después me voy. No, no es esto. Es necesario dar un paso, un paso más, que es la confesión de nuestras miserias, pero desde el corazón, es decir, que esa lista que hice de cosas malas salga del corazón.
El Vaticano anunció que esta modalidad de celebrar Misa será la que se seguirá en los próximos días.
Javier Romero