Unas 40 millones de personas en todo el mundo son víctimas de la trata de personas, una industria que supone unos 40.000 millones de dólares anuales. RENATE, la Red Europea de Religiosas y Religiosos contra la trata y la explotacion, indica que solo entre el uno y el dos por ciento de las víctimas son rescatadas.
La presidenta de esta organización, Sor Imelda Poole, apunta a alguna de las causas de esta lacra como son la pobreza, la falta de desarrollo humano y económico de los lugares de origen de las víctimas o la migración en condiciones de ilegalidad.
SOR IMELDA POOLE
Presidenta de RENATE
“Si viven en la pobreza, y un miembro de la familia sabe que puede obtener una compensación rápida explotando a un sobrino o a una sobrina casándolos, que suele ser el caso, entonces lo harán”.
Este fue el caso de una estudiante universitaria de Nigeria, cuyo tío le ofreció la oportunidad de mudarse a Europa para optar a una mejor educación y, por tanto, a un futuro mejor. Le dio solo tres días para decidir y le dijo que no había tiempo para despedirse de su familia.
SOR IMELDA POOLE
Presidenta de RENATE
“Se lo pensó y tomó la decisión de ir con él. Desgraciadamente, le quitaron el pasaporte cuando aterrizaron en Italia y la vendieron enseguida. El tío desapareció y ella cayó en manos de los traficantes que abusaron de ella y la obligaron a prostituirse”.
Algunas de estas víctimas tienen la suerte de ser rescatadas y tener una segunda oportunidad. Sin embargo Sor Imelda explica que quedan marcadas de por vida y arrastran varios traumas, como le sucedió a una niña de 12 años también traficada por un familiar.
SOR IMELDA POOLE
Presidenta de RENATE
“Sufría pesadillas constantemente. Estaba en la flor de la vida, incluso tuvo algún novio, pero no se recuperaba. En su vida había algo de lo que nunca pudo llegar a hablar”.
Por eso RENATE, presente en 31 países, socorre a estas víctimas brindándoles formación laboral y ayudándolas con su documentación. Esta organización además analiza las causas y consecuencias de esta tragedia; alerta a las autoridades de los casos y las insta a aplicar las leyes. Los religiosos y las religiosas de RENATE pretenden despertar las conciencias sobre la trata, una lacra que despoja a las personas de sus vidas, su futuro y su dignidad humana.