Tras la Semana Santa, el Papa centró su catequesis en la “comunión de los santos”. La definió como una “solidaridad” que viven los santos del Cielo con quienes están todavía en la Tierra. Aunque no solo.
FRANCISCO
Este vínculo de oración lo experimentamos ya aquí, en la vida terrena: rezamos los unos por los otros. Pedimos oraciones y las ofrecemos...
Dijo que rezar unos por otros es una manera de crecer en el amor. Se crea un círculo virtuoso que refuerza los lazos que hay entre las personas.
FRANCISCO
Las oraciones, las buenas, son difusivas FLASH. Se propagan continuamente, con o sin mensajes en las redes sociales. Desde los pasillos de un hospital como en los momentos de fiesta o en los que se sufre en silencio... El dolor de cada uno es el dolor de todos y la felicidad de alguien se traspasa al ánimo de los demás.
Además, el Papa explicó que rezar por la gente supone dar un paso importante: pensar en esa persona y, por tanto, amarla.
FRANCISCO
El primer modo de rezar por alguien es hablarle a Dios de esa persona. Si lo hacemos con frecuencia, cada día, nuestro corazón no se cierra, sino que permanece abierto a los demás. Rezar por otras personas es el primer modo de amarlas y de estarles cerca de manera concreta.
Antes de terminar recordó que el domingo que viene se celebra la fiesta de la Divina Misericordia instituida por San Juan Pablo II.
También pidió oraciones por las víctimas de las inundaciones en Indonesia y Timor Oriental.
Javier Romero