La Basílica de San Pedro, la de San Clemente Romano y otros lugares de culto son parte de la peregrinación que el obispo de Greensburg, en Pensilvania, ha hecho a Roma estos días. Un viaje en el que ha compartido las peticiones de oración de sus fieles.
LARRY J. KULICK
Obispo de Greensburg, PA
“Una de las intenciones que más nos llegan, al margen de las que se refieren a la salud y asuntos familiares, es el deseo de que ayudemos a los hijos a que vuelvan a la Iglesia. Me sorprendió”.
Un retorno a la Iglesia por parte de adultos que se ha convertido en tendencia en la diócesis en los últimos años.
LARRY J. KULICK
Obispo de Greensburg, PA
“En la preparación para el Bautismo de este año la catedral estaba abarrotada, con casi 150 candidatos a formar parte de la Iglesia. Uno puede pensar que 150 no son muchos, pero para una diócesis de apenas cuatro condados supone todo un fenómeno, una cifra muy superior a la de los últimos años”.
Más allá del número de bautizos de adultos, lo que realmente sorprende al obispo de Greensburg es el nivel de compromiso.
LARRY J. KULICK
Obispo de Greensburg, PA
“Me he dado cuenta de que quienes están viniendo a la Iglesia, muchas familias jóvenes, lo hacen decididos a ser auténticos discípulos. Y por tanto llegan con una gran determinación, con mucha fe y dispuestos a participar activamente en sus parroquias”.
Un fenómeno que achaca al vacío cultural y moral que existe en las sociedades occidentales.
LARRY J. KULICK
Obispo de Greensburg, PA
“Nuestra sociedad apenas presenta normas morales. Se limita a principios humanos de bondad o propiedad privada. Y por ello creo que mucha gente está diciendo: ‘Tenemos que cambiar. Tenemos que hacer algo diferente’. Y ese algo diferente significa volver a la esencia de la Iglesia y sus enseñanzas”.
La misma doctrina que hace 2.000 años, pero difundida también con el apoyo de las nuevas tecnologías en esta diócesis de Pensilvania.