Francisco agradeció a este grupo de vietnamitas residentes en Estados Unidos la ayuda que prestan a las Pontificias Obras Misioneras.
Les dijo que su trabajo es un gesto tan concreto que ayuda a transmitir esperanza entre los más necesitados. Y no solo eso les dijo que , al tiempo, esa ayuda es un motor de evangelización.
FRANCISCO
Espero que este tiempo permita a todos los fieles vivir un encuentro auténtico y personal con el Señor Jesucristo, a quien debemos anunciar siempre, en todas partes y a todos como nuestra esperanza. Su compromiso en apoyar las obras misioneras y caritativas de la Iglesia universal es una expresión concreta de este anuncio y contribuirá a llevar la esperanza nacida del Evangelio a muchos de nuestros hermanos y hermanas en diversas partes del mundo.
Francisco señaló con agradecimiento una característica distintiva de muchos católicos que inmigraron desde Vietnam hasta Estados Unidos: la fe sólida que se llevaron con ellos.
BAM