La Navidad está cada vez más cerca y eso se empieza a notar en el Vaticano, y más, en la agenda del papa Francisco.
El 24 de diciembre a las siete de la tarde presidirá el primer evento: la Misa del Gallo y la apertura del Jubileo.
Un día después, el 25 de diciembre, el papa impartirá la bendición “Urbi et Orbi” desde el balcón de la basílica de San Pedro. Es la bendición que los pontífices dan en ocasiones especiales y su significado es “de Roma al mundo entero”. Allí pronunciará su mensaje navideño por la paz.
Al día siguiente Francisco protagonizará un gesto muy simbólico: visitará una cárcel romana, para celebrar el jubileo con ellos y demostrar a los presos la cercanía de Dios en momentos difíciles.
PAPA FRANCISCO
Conocemos la situación de las cárceles, a menudo superpobladas -también en mi tierra-, lo que provoca tensiones y dificultades. Por eso, quiero decirles que estoy cerca de ustedes, y renuevo mi llamamiento, especialmente a quienes pueden actuar en este ámbito, para que sigamos trabajando por la mejora de la vida en las cárceles.
El último día del año es tradición que el papa visite el nacimiento de la plaza de San Pedro y salude a los peregrinos presentes. Será a las cinco de la tarde.
Ya en el 2025, el 1 de enero celebrará la jornada mundial de la paz con una misa a las 10 de la mañana.
El penúltimo evento de su agenda es el 6 de enero cuando presida la misa por la Epifanía a las 10 de la mañana.
La Navidad en el Vaticano concluirá el 12 de enero con el bautismo de Jesús. Es un día muy especial en el Vaticano porque el papa suele bautizar en la Capilla Sixtina a los hijos de empleados de la Santa Sede.
BAM