La atmósfera navideña envolvió un año más la plaza de San Pedro. Bandas locales italianas tocaron villancicos tradicionales ante las miradas de miles de turistas y curiosos.
Lo que se iba a inaugurar era el nacimiento y el árbol, que este año, iban a ser más admirados de lo habitual.
CARD. FERNANDO VÉRGEZ
Presidente, Gobernación Estado Ciudad del Vaticano
Este año, la solemnidad de la Navidad coincide con la apertura de la Puerta Santa de la basílica de San Pedro, con la cual se inaugura el Jubileo. Por tanto, el árbol y el nacimiento tendrán una visibilidad aún mayor a causa del fuerte flujo de peregrinos previsto para el año Santo.
El árbol mide 29 metros y pertenece a una región italiana donde se cuida que haya recambio generacional de abetos.
El pesebre viene de Grado, una localidad mediterránea situada en la costa norte de Italia. Y representa la tradicional cabaña de pescadores de inicios del siglo XX. Los reyes magos llegan en barca y para realizar esta obra trabajaron día y noche artesanos locales.
El momento de la inauguración llenó de luz la plaza de San Pedro y también de ilusión ante la inminente llegada de la Navidad.
JRB