Francisco ha dirigido una carta a la Iglesia de Roma con motivo del Jubileo. En ella, hace una petición a párrocos, religiosos y al clero: que den un signo tangible de atención a los problemas de vivienda.
En concreto, lo que les sugiere es que quienes tengan inmuebles los pongan a disposición de las personas que no tienen casa o están en riesgo de perderla.
Un gesto con el que el papa quiere frenar la emergencia habitacional, sobre todo, de cara al Año Santo, para el que se espera que vengan a la Ciudad Eterna unos 32 millones de peregrinos.
A esto se suma el peligro de no poder pagar una vivienda. Los alquileres se han disparado en los últimos año. Según el portal Statista, Roma es la segunda ciudad de Europa con los alquileres más caros: de media, unos 2.000 euros al mes.
CA