Se cumplen 40 años del martirio del sacerdote polaco Jerzy Popieluszko, asesinado por agentes de la policía comunista de Polonia. El periodista Wlodzimierz Redzioch acaba de publicar un libro que recuerda el coraje de este simple viceparroco de Varsovia.
WLODZIMIERZ REDZIOCH
Periodista
Se ha enfrentado a este régimen como debería hacerlo un cristiano ante cualquier tipo de totalitarismo. Ante todo, manteniendo la fe y la dignidad de la persona y combatiendo el mal con el bien. Este es el mensaje del padre Jerzy que sigue siendo actual.
La claridad con la que hablaba de justicia y de libertad en plena dictadura supusieron años de interrogatorios y persecución.
WLODZIMIERZ REDZIOCH
Periodista
Era consciente, desde un año, un año y medio antes, de que los servicios secretos querían callarlo o eliminarlo. Pero él a menudo repetía que no se puede traicionar la verdad y no se puede traicionar a las personas que confían en ti. Se convirtió en el padre espiritual de los trabajadores de la fábrica de aceros de Varsovia y también capellán simbólico de todo el sindicato de Solidarność.
El prestigio de este sencillo sacerdote irritaba a unas autoridades comunistas que decidieron detenerlo y torturarlo hasta la muerte en octubre de 1984. Su biógrafo destaca el mensaje de esperanza, que se mantuvo en el corazón de los fieles incluso después del crimen.
WLODZIMIERZ REDZIOCH
Periodista
En su funeral han participado cerca de un millón de personas, en un silencio absoluto, sin ninguna provocación, como querían las autoridades. Yo he pensado que el padre Jerzy ha preparado a la población polaca a su propio funeral. Porque se ha desarrollado con una dignidad asombrosa, con un gran respeto hacia el mártir y sin ninguna provocación.
Esta última biografía de Popieluszko quiere que su testimonio de coraje y perdón sirva de ejemplo a las nuevas generaciones.
AO