Durante el ángelus el papa no pasó por alto el asesinato del jesuita mexicano Marcelo Pérez en Chiapas, el pasado 20 de octubre. El pontífice le dedicó al sacerdote estas palabras.
FRANCISCO
Un cuidadoso servidor del Evangelio y del pueblo fiel de Dios. Su sacrificio, como el de otros sacerdotes asesinados por fidelidad al ministerio, sea semilla de paz y de vida cristiana.
El asesinato de este sacerdote generó conmoción en México, donde su labor entre las comunidades indígenas generó recelos en el mundo de la criminalidad.
Francisco había visitado Chiapas en 2016, durante su viaje a México. Allí pasó un día intenso en donde uno de sus principales encuentros fue la misa celebrada junto a miles de indígenas.
FRANCISCO
En el corazón del hombre y en la memoria de muchos de nuestros pueblos está inscrito el anhelo de una tierra, de un tiempo donde la desvalorización sea superada por la fraternidad, la injusticia sea vencida por la solidaridad y la violencia sea callada por la paz.
La situación en México es crítica. Según el Centro Católico Multimedial entre 2019 y 2024 hasta 11 ministros de culto católicos han sido asesinados a manos del crimen organizado; un promedio de dos al año.
JRB