Se ha reunido con los reyes, los católicos o los ancianos del país, pero el motivo oficial de la visita del papa a Bélgica era este: celebrar los 600 años de una de las universidades más antiguas del mundo, la de Lovaina.
En su discurso, Francisco les dio las gracias por tener la mente abierta y ser punto de acogida para tantos refugiados que huyen de su tierra.
FRANCISCO
Mientras algunos piden que se refuercen las fronteras, vosotros, como comunidad universitaria, las habéis ampliado, gracias. Habéis abierto vuestros brazos para acoger a estas personas marcadas por el dolor, para ayudarles a estudiar y a crecer. Gracias.
En 1968, la universidad se dividió en dos por diferencias lingüísticas: la del dialecto neerlandés y la francesa. Son 24 km los que separan ambos campus. Francisco visitó primero esta, la de lengua flamenca.
Al terminar el encuentro, el papa se acercó a otra sala. Ahí se encontraba un grupo de refugiados. El papa saludó uno a uno y fue escuchando sus testimonios.
CA