Los hábitos marrones llenaron el palacio apostólico. El papa recibió a los frailes capuchinos en audiencia. Allí, Francisco les animó y advirtió de la importancia de mantener a las personas en el centro de su trabajo.
FRANCISCO
Les invito a estar atentos para que nunca se pongan en el centro los recursos económicos, los cálculos humanos u otras realidades semejantes. Son todos instrumentos útiles, de los que también hay que preocuparse, pero siempre como medios, nunca como fines. En el centro están las personas.
El papa habló a los frailes de las tres dimensiones de la orden a la que pertenecen: fraternidad, disponibilidad y compromiso por la paz.
Los frailes capuchinos se reunieron con el papa con ocasión de su 86ª asamblea general. Son una rama de la orden franciscana y fueron fundados en 1528.
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