Fue llamado Gaemi. Se trata del supertifón que arrasó Filipinas a finales de julio. Afectó a más de 3 millones de personas y se cobró la vida de, al menos, 34. Mientras la tormenta arrasaba el país, un hombre arriesgó su vida para salvar el Santísimo Sacramento así como reliquias de valor incalculable.
El Dr. Dela Cruz es el presidente del Reliquarium de Marikina City. Allí se conservan más 1.000 reliquias modernas e históricas. En este mismo lugar se celebra misa y se ofrece confesión. Cuando llegó el tifón, el Dr. Dela Cruz estaba solo en el centro en mitad de la noche.
DR. DAVE DELA CRUZ
Profesor, Presidente del Reliquarium
Lo primero que pensé aquella noche fue en salvar al Santísimo Sacramento.
Pase lo que pase, Jesús debe ser lo primero.
Así que después de traer a Jesús Sacramentado, dije: "Muy bien Señor, ya estás a salvo. Ahora tengo que traer a tus santos".
Pero después de salvar el Santísimo Sacramento en un lugar seguro, Dela Cruz resbaló y cayó inconsciente durante dos horas. Al despertar, el agua había inundado el edificio.
DR. DAVE DELA CRUZ
Profesor, Presidente de Reliquarium
Después de caerme y después de recuperar la consciencia, lo primero que hice fue subir y dar gracias al Señor, Señor gracias porque sigo vivo.
A pesar del riesgo que existía, tras su momento de oración, volvió para salvar las reliquias. Asegura que para él fue una verdadera prueba de su fe.
DR. DAVE DELA CRUZ
Profesor, Presidente del Reliquarium
La razón por la que hice esto y estoy dispuesto a arriesgar mi vida es porque esta es mi oración a Jesús. Estoy dispuesto a ofrecer mi vida a Él, por Él, por su Iglesia y por sus santos. Y creo que ese tiempo fue mi prueba de fe.
Aunque tras el tifón el edificio ha sufrido daños, el Santísimo Sacramento y las reliquias permanecieron a buen recaudo. El Reliquarium continuará su misión de inspirar la santidad a todos aquellos que visiten el centro.
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TR: AM
