Este día, hace más de 500 años, se consagró una de las capillas más famosas del mundo. Se encuentra en el corazón del Vaticano.
El 15 de agosto de 1483, el papa Sixto IV dedicó a la Virgen María, en la fiesta de su Asunción, la capilla que pronto llevaría su nombre.
Pero la Sixtina no estaría completamente terminada hasta 1512, después de que Miguel Ángel añadiera algunas de sus obras más conocidas, como la Creación de Adán y el Juicio Final, que el artista conectó de una manera única.
GUIDO CORNINI
Experto en arte
Miguel Ángel tenía un razonamiento teológico específico detrás de la desnudez. Siendo el Juicio Final, la desnudez del hombre es igual que cuando vino al mundo durante la creación. De este modo, enlaza con la creación del hombre representada por el famoso encuentro de las manos.
Estos famosos frescos recubren las paredes y el techo de la Capilla Sixtina. Son el telón de fondo de muchos acontecimientos importantes de esta capilla papal.
Desde bautizos…
Misas con el Papa…
hasta servir como lugar donde los cardenales de todo el mundo se reúnen para elegir a un nuevo papa.
Y en el centro está la pieza del Juicio Final, donde María ocupa un lugar especial. Este es un claro recordatorio de sus vínculos con la Capilla Sixtina, que se remontan a su dedicación el 15 de agosto de 1483.
KG
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