Normalmente en julio los papas reducen su actividad pública. A menudo iban a la residencia de verano de Castel Gandolfo, situada en las afueras de Roma, en una zona más fresca, a casi 30 kilómetros de distancia.
Sin embargo Francisco no ha seguido esa línea. Siempre ha permanecido en el Vaticano realizando lo que se llama “trabajo de puertas para adentro”.
Es decir, sus encuentros públicos se aplazan en casi su totalidad hasta el mes de agosto. No habrá audiencias generales y solo se le podrá ver cada domingo, rece el ángelus. Tampoco está previsto que presida liturgias públicas hasta septiembre.
Aparte de eso el 1 de julio el papa presidirá un consistorio ordinario para cardenales; una reunión oficial con los purpurados, en el que se espera que el papa apruebe la fecha de algunas canonizaciones como la de Carlo Acutis, el joven italiano que falleció en 2006 cuando tenía solo 15 años.
11 de octubre de 2020
FRANCISCO
Su testimonio indica a los jóvenes de hoy que la felicidad verdadera se encuentra cuando se pone Dios en el primer puesto, sirviéndole en los hermanos, especialmente a los últimos. ¡Un aplauso al joven beato millennial!
El 7 de julio, el papa también tiene pensado realizar una visita pastoral a Trieste, en el norte de Italia.
Y el 28 de julio en el Vaticano se celebrará la cuarta Jornada Mundial de los Abuelos. Normalmente Francisco participa en ella y preside las celebraciones pero por el momento esa posibilidad no figura en su agenda este año.
También conviene destacar que además de esas citas puntuales, es normal que el papa dedique este tiempo más calmado a escribir sus documentos magisteriales. Por ejemplo, el pontífice espera publicar en septiembre uno dedicado al Sagrado Corazón.
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