Las personas con discapacidades se encuentran en una situación vulnerable ante los abusos. Y es por eso que en la Pontificia Universidad Gregoriana organizaron este encuentro internacional.
En él participaron más de 200 personas de 55 países. La idea es cómo promover dentro de la Iglesia espacios seguros para este público y para ver cómo sensibilizar mejor a parroquias y demás comunidades católicas.
P. HANS ZOLLNER
Director, Instituto de Antropología
La Iglesia tiene un enorme potencial para liderar el camino, dado que gestiona muchos hospitales o casas para discapacitados en todo el mundo. Ya hay algunos sitios donde se ve que hay un fuerte compromiso pero en otros lugares, como hemos visto aquí, y principalmente en África, Asia, partes de América Latina, hay una falta de sensibilidad al respecto y además hay muy pocas personas preparadas.
Entre los participantes en la conferencia había obispos, profesores y trabajadores diocesanos. Juntos, abordaron las medidas concretas que deben adoptarse: desde la creación de sistemas de información más inclusivos hasta el aumento del número de intérpretes de lengua de signos y la mejora de los recursos de las escuelas, organizaciones y parroquias católicas.
DR. ANGELA RINALDI
Pontificia Universidad Gregoriana
Es importante iniciar un proceso de cambio real en la cultura y en la mentalidad. Sabemos que hay muchos prejuicios hacia las personas con discapacidad, así que uno de los puntos principales es, al menos, detener este prejuicio y también considerarlos como parte de nuestra sociedad sin diferencias, sin hablar de "ellos" y “nosotros”.
Los cientos de asistentes han regresado a sus respectivos países para trabajar en lo hablado y aprendido. Pero muchos volverán a Roma para la Conferencia Internacional programada para el 2025, que se centrará en cómo salvaguardar a las mujeres, especialmente a las religiosas, de los abusos.
AT