El papa dedicó su catequesis semanal a la virtud teologal de la caridad. En su discurso, Francisco dijo que el amor que proviene de Dios es distinto al amor humano.
Dijo que el enamoramiento y la amistad son experiencias humanas pero el amor que proviene de Dios capacita a amar “incluso al que no nos ama”. Por ello, ese amor a Cristo “nos empuja a ir donde nunca iríamos: al pobre, al enfermo, a los enemigos”.
Francisco subrayó que el amor que es caridad no obra “en nombre de un ideal” sino que “ofrece el perdón cuando es más difícil perdonar”.
CATEQUESIS DEL PAPA FRANCISCO
Queridos hermanos y hermanas:
Nuestra reflexión de hoy es sobre la caridad, tercera virtud teologal, con la que completamos nuestras catequesis sobre las virtudes. La caridad proviene de Dios y nos encamina hacia Él; ella nos permite amarlo, llegar a ser sus amigos, a la vez que nos capacita para amar al prójimo como Dios lo ama.
La caridad de Cristo, como nos lo recuerda en las bienaventuranzas, nos apremia a ocuparnos de los hermanos más pequeños y relegados. Se trata de un amor concreto e intrépido, que abraza incluso lo que no es amable, perdona, olvida, bendice, se entrega sin medida.
Esta virtud es la “puerta estrecha” que nos permitirá llegar al cielo; será el único criterio de juicio, pues “al atardecer de nuestra vida seremos examinados en el amor”. Cómo lo sabemos, al final sólo permanecerá la caridad.
Saludo cordialmente a los peregrinos de lengua española. Pidamos al Señor que aumente nuestra caridad y nos conceda un corazón abierto y generoso para no ser indiferentes ante las necesidades de los demás. Que Jesús los bendiga y la Virgen Santa los cuide. Muchas gracias.
PA