Durante la catequesis el papa reflexionó sobre la esperanza, una de las tres virtudes teologales. Señaló que la esperanza, para un cristiano, es Jesús mismo y que “sin esperanza (…) el hombre vive en la tristeza y cae en la desesperación. Pecamos contra la esperanza cuando nos quedamos anclados en el pasado, olvidando que Dios nos ama, que es misericordioso y más grande que nuestro corazón; pecamos cuando no tenemos el valor de tomar decisiones que nos comprometan de por vida”.
RESUMEN DE LA CATEQUESIS DEL PAPA:
Queridos hermanos y hermanas:
Hoy reflexionamos sobre la esperanza, que es la virtud teologal que nos ayuda a comprender que nuestra felicidad es el Reino de los cielos y la vida eterna, confiando en las promesas del Señor Jesús y en el auxilio de las gracias del Espíritu Santo.
Se fundamenta en el misterio pascual de Jesucristo y en el don del Espíritu Santo, no en nuestro esfuerzo y voluntad personal. Frente a las preguntas trascendentales sobre el destino de nuestra vida y del mundo, la esperanza es la respuesta que Cristo nos da. Con ella, podemos vivir con alegría y serenidad nuestro presente, pues Jesús nos asegura un futuro confiable y un horizonte luminoso.
Sin esperanza, en cambio, el hombre vive en la tristeza y cae en la desesperación. Pecamos contra la esperanza cuando nos quedamos anclados en el pasado, olvidando que Dios nos ama, que es misericordioso y más grande que nuestro corazón; pecamos cuando no tenemos el valor de tomar decisiones que nos comprometan de por vida.
Saludo cordialmente a los peregrinos de lengua española. Que el Señor acrezca nuestra esperanza y nuestra paciencia, para ser artesanos de paz y de bien en un mundo que tiene mucha necesidad de esta virtud. Que Jesús los bendiga y la Virgen Santa los cuide. Muchas gracias.
JRB