Europa quiere incluir el aborto en su Carta de Derechos Fundamentales, y así se ha votado en el Parlamento: 336 votos a favor, 163 en contra y 39 abstenciones.
Esto tiene lugar pocas semanas después de que Francia se convirtiese en el primer país del mundo en blindar el aborto como un derecho en su constitución. Ante esto, los obispos europeos han expresado su preocupación y esperan que esta opinión de Europa no se llegue a materializar.
MANUEL BARRIOS
Secretario general, COMECE (Europa)
Esto es, evidentemente, un voto ahora del parlamento, favorable a esta resolución, pero que, para que esto pueda tener lugar, que se modifique la Carta y se incluya el aborto, esto es un proceso muy complicado y, además, tiene que tener la unanimidad de todos los países.
Lo ocurrido en la Unión Europea se puede considerar un primer paso, pues en el futuro, para modificar la Carta, se debería contar con el “sí” de los 27 Estados miembros, a lo que, probablemente, se negarían países como Malta, Hungría o Polonia.
MANUEL BARRIOS
Secretario general, COMECE (Europa)
Por eso, es difícil que llegue a buen puerto esta propuesta. Esto es muy difícil porque hay países que, evidentemente, tienen una legislatura completamente contraria a esto. Es muy difícil. Lo que sí es que crea un precedente; crea una mentalidad, y es lo que preocupa.
La postura de la Iglesia sobre el aborto sigue siendo clara: un no rotundo a una práctica que, como resaltan, va en contra de las mujeres y de los bebés que aún no han nacido.
MANUEL BARRIOS
Secretario general, COMECE (Europa)
Evidentemente, el aborto no es un derecho. El derecho es el derecho a la vida y, sobre todo, hay que defender este derecho cuando la persona está en una situación de vulnerabilidad, como es la situación de un niño no nacido en el vientre de su madre.
Desafortunadamente, muchos no piensan así, porque piensan que para promover a la mujer y defender los derechos de la mujer hay que proveer el aborto. Y esto, evidentemente, es un argumento que para nosotros no vale.
Pocos días antes de esta votación, el prefecto del Dicasterio para la Doctrina de la Fe, Víctor Manuel Fernández, presentaba un documento que avalaba esta postura por ir en contra de la dignidad humana, alertando de que incluirlo en la ley es señal de una peligrosa crisis del sentido moral.
MANUEL BARRIOS
Secretario general, COMECE (Europa)
De hecho, el párrafo importante sobre el aborto en este documento lo citan los obispos en su declaración, que hicieron pública el martes. Porque ahí, evidentemente, se ve que esta enseñanza de la Iglesia es una enseñanza que ha sido constante siempre.
Además, la declaración del Vaticano no solo se muestra crítica sobre el aborto, sino que argumenta que la terminología que se usa para referirse a él, es decir, “interrupción del embarazo”, tiende a ocultar su verdadera naturaleza aumentando su gravedad.
CA