Los datos lo confirman: la Iglesia en Asia y África sigue creciendo de manera exponencial; América se mantiene estable; y Europa es el continente más afectado.
Son tendencias que se ha podido ver con fuerza en las últimas décadas, y que se reflejan en las cifras de 2022, recién publicadas por la Oficina Central de Estadísticas de la Iglesia.
Los bautizados a nivel global aumentaron en 14 millones. Lo hicieron en todos los continentes y África es el que tuvo un mayor registro, creciendo en un 3%, seguida de Asia y América. En Europa, por ejemplo, pasaron a ser de 265 a 273 millones.
Pero a pesar del aumento de los católicos en el mundo, lo que sí disminuyeron fueron las vocaciones sacerdotales, incluso en Asia. Solo en África se mantiene la cifra. Unos datos que preocupan desde hace más de una década, sobre todo, en el continente europeo, que registra los peores datos, con una bajada del 8%. En América, la disminución es menor, en torno a un 3%.
Por otro lado, el número de mujeres religiosas también sigue bajando en los últimos años, de casi 609.000 en 2021 a poco más de 599.000 en 2022. Sin embargo, esto depende del área geográfica porque, aunque en Oceanía, América del Norte y Europa descienden en más de un 3%, el aumento es considerable, por ejemplo, en África, donde se encuentra el mayor número: en un año son 1358 más que en anterior.
CA