Las meditaciones del Vía Crucis de este año han sido escritas por el papa en persona aunque no se ha desvelado su contenido.
Serán las que se lean en la noche del Viernes Santo en el Coliseo. Es uno de los momentos más especiales de la Semana Santa, en el que a los pies de un escenario sobrecogedor, se recuerda el mal provocado por los hombres.
FRANCISCO
“Señor Jesús, ayúdanos a ver en Tu Cruz todas las cruces del mundo. FLASH. La cruz de los pequeños, heridos en su inocencia y en su pureza; la cruz de la humanidad que vaga en la oscuridad de la incertidumbre y en la oscuridad de la cultura de lo pasajero FLASH Señor Jesús, reaviva en nosotros la esperanza de la resurrección y de Tu definitiva victoria contra todo mal y toda muerte. Amén”.
Es normal que el papa encomiende la misión de escribir las reflexiones del Vía Crucis a una persona o a un colectivo. En una ocasión, por ejemplo, fueron los alumnos de un colegio romano y en el año de la pandemia lo escribieron presos de una cárcel. Ese fue especialmente sugestivo porque a causa de las restricciones se pasó de un abarrotado Coliseo a una plaza de San Pedro completamente vacía.
JRB