El papa se reunió algunos miembros de la Iglesia católica de Nigeria, un país donde miles de cristianos son perseguidos.
El grupo estaba formado por nigerianos que viven actualmente en Roma. En su mensaje, el papa les animó a no aislarse, sino a considerar la propia cultura como un don que compartir a favor de la unidad.
FRANCISCO
Finalmente, queridos hermanos y hermanas, el diálogo. Lamentablemente, muchas regiones del mundo viven conflictos y sufrimientos, y también Nigeria atraviesa un período difícil. Os aseguro mis oraciones por la seguridad, la unidad y el progreso espiritual y económico de vuestra nación. Invito a todos a favorecer el diálogo y a escucharse unos a otros con el corazón abierto, sin excluir a nadie ni política, ni social, ni religiosamente.
Nigeria se enfrenta a graves crisis económicas y sociales. Sólo en 2023 se confirmaron más de 4.000 secuestros en el país. Además, casi 95 millones de nigerianos viven en la pobreza. Ante este sufrimiento, Francisco animó a la comunidad nigeriana de Roma a trabajar por la reconciliación.
Al finalizar el encuentro, el papa se despidió con una bendición.
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