Las reclusas la llaman madre: “nadie sabe lo que han vivido para estar en la cárcel”

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Con estas palabras, la hermana Nelly León de Chile recibió el premio Zayed por la Fraternidad Humana 2024.

HERMANA NELLY LEÓN CORREA
Premio Zayed de la Fraternidad Humana 2024

Hace seis años, el papa Francisco visitó la cárcel donde he estado sirviendo por los últimos 20 años como religiosa del Buen Pastor. Ahí él les recordó a las mujeres que si bien están privadas de libertad, jamás están privadas de dignidad.

Su vocación al servicio de las mujeres vulnerables surgió durante sus prácticas en un colegio de Chile. Atestiguó la violación de una niña, pero al denunciarla no hubo repercusiones.

HERMANA NELLY LEÓN CORREA
Ganadora premio Zayed de la Fraternidad Humana

Y eso me marcó la vida, me dio un giro en 180 grados. Mi proyecto de vida era otra cosa. Y en ese momento dije “tengo que hacer algo por las niñas”.

La congregación del Buen Pastor la acercó a las reclusas. De ahí nació su proyecto “Mujer Levántate”, una fundación para la reinserción social de estas mujeres.

La fundación imparte formación profesional y atención psicológica a aquellas cuya condena finaliza en dos años. También le ofrece un hogar a las que quieren salir del ambiente que les facilita delinquir.

Ahora ellas le llaman la “madre de las reclusas” y le confían sus mayores dolores. Algunas, la han marcado profundamente.

HERMANA NELLY LEÓN CORREA
Ganadora premio Zayed de la Fraternidad Humana

Entonces me dijo “nunca me he sentido amada”, y esa frase, me paré y la abracé, fue todo lo que hice con ella.
Su madre nunca la quiso, fue víctima de un abuso de la madre, también de una violación, la crió un abuelo hasta los 12 años, el abuelo falleció y Gina se fue a la calle. Fue niña de calle y después de eso ella tuvo un par de mellizas, se las quitaron, el servicio de menores de Chile, nunca más las vió. Después tuvo otra pareja que tenía SIDA entonces Gina en ese minuto también era una persona con VIH, que vivía con VIH, con tratamiento en la cárcel pero con VIH al fin. Entonces era una historia tremenda.

La hermana Nelly dice que “son historias que arrastran otras historias”, ya que de ellas dependen sus hijos o sus nietos. La fundación quiere ofrecerles un punto de inflexión para retomar las riendas de su vida.

HERMANA NELLY LEÓN CORREA
Ganadora premio Zayed de la Fraternidad Humana

Gina marcó harto mi vida en el tema del abrazo, de la acogida, de no juzgar a las mujeres, de nadie sabe lo que una mujer ha vivido para estar privada de libertad. A veces socialmente tenemos una mirada muy dura y decimos “esta mujer cayó esta vez, cayó otra vez” y esa mujer sale y no tiene nada afuera entonces muchas veces su mayor protección es la cárcel.

Para la hermana Nelly, la fundación es “una especie parroquia dentro de la cárcel”, donde incluso pueden recibir los sacramentos. En los últimos 5 años, 700 mujeres han pasado por su programa de reinserción social. Solo el 5% reincide en conductas criminales y regresa con una nueva condena a la cárcel.

La hermana espera que el premio ayude a consolidar el proyecto y les ayude a expandirse en Chile. Además, quiere compartir su experiencia con otras emprendedoras que estén dispuestas a aplicar el modelo de “Mujer Levántate” en su propio país.

PA

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