El Vaticano mira con mucha preocupación la última etapa del sínodo alemán. Este tiene pensado crear un nuevo organismo cuyas competencias no gustan en Roma. Dicen que no tiene base canónica.
De hecho los pesos pesados del Vaticano enviaron una carta a la conferencia episcopal: la firman el secretario de Estado y los prefectos de Doctrina de la Fe y de los obispos. Los tres manifiestan sus dudas sobre la naturaleza de esa nueva organización; el llamado “Consejo sinodal”. Es más: no quieren que salga adelante.
En la misiva recuerdan que así lo señalaron a la jerarquía durante la visita ad limina en 2022 y en otra carta posterior donde se les pidió explícitamente que no continúen con ese proyecto.
En el pasado el propio papa también manifestó su preocupación ante este caso. Piensa que el sínodo alemán está siguiendo los pasos de las iglesias evangélicas o protestantes, aunque parece que desde Alemania aseguran que no. Así lo señaló Georg Bätzing tras la visita de los obispos alemanes en 2022 al Vaticano.
MONS GEORG BÄTZING
Presidente, Conferencia Episcopal Alemania
Sí, creo que cuanto más lejos se está de Alemania, más fuerte es la sensación. Es cierto que en Alemania tenemos una gran cercanía entre la Iglesia católica y la Iglesia protestante, y que nos apreciamos mucho mutuamente. Pero somos diferentes. Y la característica específica del catolicismo es que somos una Iglesia mundial sacramental y jerárquicamente organizada. Y queremos seguir siéndolo.
La asamblea plenaria de los obispos alemanes termina el 22 de febrero, y por eso Roma quiere dar este aviso formal.
Recientemente el Vaticano ha aprobado organismos promovidos por las conferencias episcopales pero que no lesionan la autoridad jerárquica de la Iglesia. Es el caso del CEAMA, el proyecto pastoral y social impulsado por los obispos de la región de la Amazonia.
JRB