El papa pidió que el clima de oración no se pierda en los templos. Lo dijo en su encuentro ante los miembros de la “Junta Constructora” de la Basílica de la Sagrada Familia de Barcelona, aunque el Vaticano no distribuyó esa frase. Como suele hacer habitualmente entrega pedazos del discurso.
FRANCISCO
Los invito, por tanto, a acoger en la basílica a los peregrinos que se acercan, para introducirlos con una actitud orante a contemplar el proyecto iconográfico del siervo de Dios Antonio Gaudí en su integridad, de forma que, como los pináculos y los campanarios, sus miradas se eleven y sus voces proclamen con los ángeles: “Santo nuestro Dios inmortal”.
Al papa se le vio débil y con ciertas dificultades para respirar aunque mantiene una agenda llena de encuentros tanto públicos como privados.
JRB