“Donde hay una necesidad, hay un Caballero”, este es uno de los lemas de los Caballeros de Colón y uno que llevan cumpliendo desde su fundación en 1882. Durante los últimos 14 años, este grupo ha cubierto una necesidad muy particular de las comunidades locales.
DREW DILLINGHAM
Director de Programas y Participación de los Socios
El antiguo Caballero Supremo de los Caballeros de Colón, Carl Anderson, se dio cuenta de la enorme necesidad que existía especialmente en las ciudades del interior, como Detroit, Washington D.C., Chicago, a través de sus viajes. Así que decidió lanzar este programa y en ese primer año, distribuimos más de 1.000 abrigos a cada una de esas ciudades.
El programa Abrigos para los Niños es una actividad, un proyecto de la Orden. Todos nuestros miembros se reúnen y recaudan fondos, recogen donaciones para comprar abrigos para los niños necesitados.
Además de abrigos para los niños, el programa también proporciona ropa a veteranos y personas sin hogar en Estados Unidos y Canadá. Los abrigos se distribuyen en otoño para que los más necesitados puedan afrontar los meses de invierno, especialmente en ciudades donde las temperaturas pueden descender por debajo de los -20°C.
El pasado diciembre, los Caballeros entregaron su abrigo número un millón en una escuela de Colorado.
DREW DILLINGHAM
Director de Programas y Participación de los Socios
El director de la escuela de Denver nos dijo: Saben, algunos de los padres se acercaron a nosotros llorando, diciéndonos la gran diferencia que esto iba a suponer para su presupuesto y lo mucho que significaba para sus hijos.
Les ayuda a participar en la vida de su escuela, a participar en sus actividades extraescolares. Uno no se lo espera, pero para muchas familias con pocos recursos es una donación que les cambia la vida, porque no todo el mundo tiene dinero para permitirse un abrigo.
Dillingham dice que los Caballeros continuarán desarrollando este proyecto y esperan celebrar la entrega de su próximo millón de abrigos.
KG
TR: PA
