El papa pide a los fieles rezar en febrero por los enfermos terminales. Para que no se queden solos en estos momentos difíciles y sus familiares tengan el apoyo para sostenerlos.
Dijo que aun cuando existan pocas posibilidades de curación, todos los enfermos tienen derecho al acompañamiento médico, psicológico y espiritual: dijo que “incurable” no quiere decir “in-cuidable”.
La petición de este mes se enmarca dentro de la Jornada Mundial del Enfermo, que Juan Pablo II instituyó en 1992 y que se celebra cada 11 de febrero, fiesta de la Virgen de Lourdes.
PA