El colegio cardenalicio cierra el año 2023 con 11 cardenales que no podrán votar en caso de cónclave al superar la mayoría de edad permitida, que son 80 años.
En esta lista, están incluidas las dos últimas incorporaciones: el cardenal Zerbo, del 27 de diciembre, y el cardenal Cipriani, del 28.
Zerbo fue creado cardenal en el consistorio de 2017, convirtiéndose en el primero nacido Mali. Fue también una figura clave en el diálogo por la paz durante la guerra civil, que estalló en 2012 y concluyó oficialmente en 2015, aunque las tensiones políticas no han cesado.
Por otro lado, está el peruano Juan Luis Cipriani, arzobispo emérito de Lima y del Opus Dei, que fue creado cardenal en 2001 por Juan Pablo II. Así recordaba los últimos días del pontífice polaco.
CARD. JUAN LUIS CIPRIANI
Arzobispo emérito de Lima, Perú
Recuerdo al papa cuando, en esos últimos instantes, prácticamente balbuceaba desde la ventana. Yo lo pude ver en el Gemelli unos días antes y luego cuando ya vengo aquí, y ya esa multitud delante del féretro de ese hombre santo también es otro momento de mucha fuerza.
El cardenal Cipriani fue miembro del Consejo de Cardenales para el estudio de los problemas económicos de la Santa Sede. Participó, además, en dos cónclaves: el de 2005, que eligió a Benedicto XVI y el de 2013, el de Francisco.
Con la salida de estos dos purpurados, el colegio cardenalicio baja el número de electores a 132. En el 2024, habrá 13 bajas más: los cardenales nacidos en 1944.
CA