Esta pequeña iglesia de la localidad polaca de Markowa se ha convertido en un importante centro de peregrinación. Era la parroquia de los Ulma, la familia mártir asesinada por los nazis por esconder a sus vecinos judíos.
P. ROMANO
Párroco, Markowa
Estamos en la iglesia parroquial de Markowa, en torno a la cual giraba la familia Ulma.
En esta iglesia fueron bautizados algunos miembros de la familia. Por ejemplo: La mujer Wiktoria y todos los niños. Józef, el marido de Wiktoria, fue bautizado en otra iglesia anterior, porque en Markowa había otras dos iglesias de madera antes de ésta.
Antes de su beatificación, la familia Ulma estaba enterrada en el cementerio local. Ahora, sus restos han sido trasladados a la parroquia.
P. ROMANO
Párroco, Markowa
Hay un gran relicario que guarda los restos de la familia Ulma.
Son los huesos que se extrajeron de la tumba situada en el cementerio durante la exhumación.
Desde la apertura del proceso de beatificación en 2003, la devoción a la familia Ulma ha crecido tanto en la comunidad católica de Markowa como en toda Polonia.
P. ROMANO
Párroco, Markowa
Estamos pensando, como parroquia, en seleccionar el día 24 de cada mes como la jornada en que celebraremos una novena permanente, una oración por la familia. ¿Por qué el 24 de cada mes? Porque fueron asesinados el 24 de marzo de 1944.
Han llegado peticiones de otras partes de Polonia para celebrar la Santa Misa por la intercesión de esta bendita familia.
La beatificación de la familia Ulma no ha hecho más que impulsar la devoción popular hacia ellos. Miles de peregrinos se desplazan hasta aquí para rezar ante ellos y acudir a su intercesión.
KG
PA