Dos nuevas salas han abierto en los Museos Vaticanos. Una de ellas ayuda a sumergirse en lo que fue una farmacia de comienzos del siglo XVII.
Se trata de la llamada Spezieria di Santa Cecilia in Trastevere, llevada por religiosas benedictinas. Funcionó durante más de 3 siglos, hasta 1936.
LUCA PESANTE
Museos Vaticanos
Se trata de una farmacia privada, es decir, una farmacia que servía para el monasterio. Dentro del monasterio vivían unas 60 monjas pero en torno a este complejo rondaban centenares de personas que trabajaban y vivían en lugares que eran de propiedad de las monjas. Lo que todo esto demuestra es que Santa Cecilia era uno de los polos productivos y mercantiles más importantes de Roma.
En algunos cajones aún conservan las plantas con las que hacían las medicinas. Y no solo eso. Hay otros objetos de gran antigüedad como esta balanza del siglo XVII hecha de madera y con la imagen de Santa Cecilia.
Estas vasijas hechas de mayólica son uno de los tesoros más importantes de esta exposición porque están tal y como eran desde el principio.
La otra sala abierta en el museo es la de las Cerámicas. Aquí se pueden contemplar el pavimento diseñado por Rafael para algunas de las dependencias vaticanas u otras obras únicas como los 34 platos de la Colección Carpegna.
Estas dos salas están a la salida de la Capilla Sixtina. Para acceder a ellas es necesario reservar.
JRB
