Las cifras de inmigrantes que llegan a las costas del sur de Europa sigue en aumento. Los últimos datos del Ministerio del Interior del gobierno italiano datan que, hasta el 4 de agosto de este año, han desembarcado más de 90.000 personas. Una cifra que duplica la del año anterior hasta dicha fecha.
Muchos de ellos han aprovechado el buen tiempo del período estivo para cruzar el mar. Pero en ocasiones la travesía termina en tragedia.
Durante el fin de semana, se produjo un naufragio con un alto número de víctimas: 41 personas fallecieron, tres de ellas niños. Fue frente a la costa de Lampedusa.
Cruz Roja de Italia explicó que los cuatro migrantes supervivientes les relataron lo que había sucedido: salieron 45 personas en un bote el jueves por la noche desde Sfax, una ciudad portuaria de Túnez. No murieron gracias a los salvavidas y al rescate de la Guardia Costera Italiana.
Horas más tarde, Francisco publicó un mensaje en su cuenta de Twitter. Expresaba que había recibido con dolor esta noticia. El pontífice también pidió que no se permanezca “indiferente” ante estas tragedias.
El papa sigue de cerca las diferentes crisis migratorias, tanto en Europa como en el resto del mundo.
CA