Un grupo de 22 refugiados procedentes de Afganistán llegó a Roma en el marco de la iniciativa Corredores Humanitarios, organizada por la Comunidad de Sant’Egidio y otras organizaciones eclesiales.
MARCO IMPAGLIAZZO
Presidente de la Comunidad de Sant’Egidio
El corredor humanitario garantiza, a expensas de la asociación que acoge, de los ciudadanos italianos que acogen y no del Estado, la recepción y la integración de personas que se encuentran en situaciones verdaderamente dramáticas y que se ven obligadas a huir de graves crisis.
El grupo procedía de un campo de Pakistán, donde vivían desde hace casi dos años. Son solo una pequeña parte de las decenas de miles de solicitantes de asilo procedentes de Afganistán.El proyecto Corredores Humanitarios es una colaboración entre las Iglesias católica y protestante de Italia, además del gobierno italiano.
Comenzó tras el trágico naufragio frente a Lampedusa en 2013, en el que murieron más de 300 migrantes y refugiados.El objetivo del proyecto es proporcionar a las personas en “condiciones vulnerables” una entrada segura y legal en Italia. Es una iniciativa que apoya el papa. Francisco ha hablado con frecuencia sobre respetar la dignidad y los derechos de los migrantes y refugiados.
FRANCISCO
16 de abril de 2016
Sin embargo, no debemos olvidar que los migrantes, antes que números son personas, son rostros, nombres, historias. Europa es la patria de los derechos humanos, y cualquiera que ponga pie en suelo europeo debería poder experimentarlo. Así será más consciente de, a su vez, respetarlos y defenderlos.Más de 6.000 refugiados, casi todos acogidos en Italia, han llegado sanos y salvos a Europa gracias a la ayuda de esta iniciativa ecuménica en favor de los migrantes.
KG
TR: CA
