Puede que esta representación de la Resurrección de Jesús le resulte familiar. Esta obra maestra del Perugino suele encontrarse en la pared de fondo durante las reuniones papales en la biblioteca del Palacio Apostólico.
DR. FABRIZIO BIFERALI
Curador de la Pinacoteca Vaticana
La pintura ha atestiguado las distintas visitas importantes de jefes de Estado al Vaticano desde los años 70 hasta el papado de Francisco. Es una obra que ha presenciado estos encuentros diplomáticos con jefes de estado o reyes, reinas, príncipes, princesas. Tiene una historia interesante porque es una obra que se puede ver a través de un filtro de televisión.
Normalmente, sólo estos jefes de Estado han podido ver esta obra de arte de 500 años de antigüedad. Ha sido prestada a los Museos Vaticanos durante unos meses para celebrar una ocasión muy especial.
DR. FABRIZIO BIFERALI
Curador, Pinacoteca Vaticana
Esta obra está aquí para celebrar el quinto centenario de la muerte del Perugino. En 1523, el artista murió debido a la peste. Hemos querido participar en las celebraciones del Perugino dando al público de los Museos Vaticanos la oportunidad de ver una obra que de otro modo sería casi imposible contemplar.
A los 50 años, cuando yerminó de pintar este cuadro, Perugino estaba en la cima de su carrera y era considerado uno de los artistas italianos más famosos. Ya había pintado muchos frescos en la Capilla Sixtina. El Dr. Biferali considera que esta pieza de la Resurrección es un testimonio de la madurez de su arte.
DR. FABRIZIO BIFERALI
Curador, Pinacoteca Vaticana
Esta obra pretende ser una compilación de todas sus experiencias anteriores y es, de hecho, una obra maestra porque consigue mezclar de una manera muy desenfadada y mimética, pistas que llevan hacia otros artistas, contemporáneos o anteriores.
Hasta el 15 de septiembre, esta pieza histórica será expuesta por los Museos Vaticanos para que todo el mundo pueda verla antes de que vuelva a la intimidad del palacio papal.
KG
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