El consejo de cardenales es un órgano consultivo y sin poder ejecutivo. Fue creado por Francisco en 2013 escuchando lo que los purpurados pedían al futuro Papa en las congregaciones generales, es decir, en las reuniones previas a la elección de un pontífice en el Cónclave. Fue un momento en que el entonces cardenal Bergoglio tomó nota de las necesidades de la Iglesia.
El consejo de cardenales pretende ser un órgano complementario a la Curia Romana para hacer llegar al Papa ruegos y preguntas de todas las regiones del mundo. Por eso, aunque sea muy pequeño, tiene representantes de todos los continentes.
El número de componentes de este Consejo ha variado con los años, antaño conocido como C-8. Al contar ahora con nueve cardenales, se lo podría llamar C-9.
Entre los cardenales que han estado más tiempo en el cargo está Pietro Parolin, Secretario de Estado. Oswald Gracias, arzobispo de Bombay, o Seán Patrick O'Malley, arzobispo de Boston,
El cardenal Óscar Rodríguez Maradiaga fue también muchos años coordinador de este organismo.
En otras ocasiones el hondureño ya ha subrayado la importancia que da la nueva Constitución Apostólica, Preadicate Evangelium, a dar voz en la Iglesia a todas las regiones. El Consejo de Cardenales se implicó durante nueve años en su redacción.
CARD. ÓSCAR R. MARADIAGA
Coordinador, Consejo de Cardenales
No hay necesidad de que todos los dicasterios estén dirigidos por un cardenal o por un obispo. Pueden ser también dirigidos por una laica, por un laico o simplemente por un religioso o religiosa. No quiere decir esto tampoco populismo. No. Es ir identificando que la vocación de un cardenal es ser consejero del Papa.
Este grupo de purpurados también ha sido consultado en el pasado sobre el diaconado femenino o la estrategia comunicativa de la Santa Sede.
RM