La investigación por las supuestas irregularidades en la gestión de fondos financieros del coro de la Capilla Sixtina comenzó en septiembre de 2018, cuando el Vaticano autorizó el inicio del proceso y el promotor de Justicia, Alessandro Diddi, decidió enviar a juicio a sus responsables.
La primera audiencia se realizó el pasado 24 de mayo. Los imputados: Massimo Palombella, director del coro; Michelangelo Nardella, director administrativo; y Simona Rossi, esposa de este último. Se les acusa de haber utilizado supuestamente el dinero de varios conciertos musicales para beneficio propio; dinero que se depositó en la cuenta de un banco italiano.
La segunda audiencia tuvo lugar el 12 de junio. Fue a declarar Georg Ganswein, secretario de Benedicto XVI, en calidad de testigo, ya que el coro de la Capilla Sixtina dependía de la Prefectura de la Casa Pontificia, de la que él era el máximo responsable, hasta enero de 2019, cuando pasó a depender del Maestro de las Celebraciones Litúrgicas.
Ganswein, en su declaración, afirma que “no tenía pruebas, pero sí sospechas” sobre los actos de Palombella y Nardella. La próxima fecha del juicio está fijada para el 26 de julio, en la que declararán de nuevo los tres imputados.
CA