Era la fiesta de la Santísima Trinidad. Y antes de rezar el Ángelus el papa reflexionó sobre su importancia en la vida cristiana.
Mientras hablaba se detuvo a explicar el significado de un gesto muy común entre las personas creyentes: la señal de la cruz.
FRANCISCO
Haciendo la cruz en nuestro cuerpo recordamos cuánto Dios nos ha amado, hasta dar su vida por nosotros. Y nos repetimos que su amor nos envuelve completamente, de arriba a abajo, de izquierda a derecha, como un abrazo que no nos abandona nunca.
Al terminar el rezo del ángelus, Francisco también rezó por las víctimas del trágico incidente de tren en la India.
JRB