El papa Francisco recibió un recuerdo muy especial de España. Varios embutidos que le llevaron al Palacio Apostólico los miembros de la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores.
Y unos sobres de jamón, chorizo de otras zonas de España que están aquí. Seguro que estará bueno, Santidad, porque ha sido preparado con mucho cariño.
Francisco agradeció el regalo y advirtió sobre los peligros que tiene estrangular alimentariamente a las regiones empobrecidas, como ha sucedido con el cuerno de África a raíz de la invasión rusa de Ucrania.
FRANCISCO
Es necesario trabajar para que este inmenso bien que Dios nos regala no se convierta en arma, por ejemplo, limitando la llegada de alimentos a las poblaciones en conflicto. O no se convierta en mecanismo de especulación.
El Papa advirtió también contra las colonizaciones ideológicas que atacan la dignidad de quienes trabajan en el campo.
FRANCISCO
Uno asume el esfuerzo de trabajar duro porque con los animales no se tienen días festivos ni se tienen huelgas. Aún más difícil es aceptar la incomprensión de quienes no valoran algo tan esencial para la vida como la producción de alimento o prefieren buscar culpables en vez de soluciones.
Finalmente los visitantes regalaron al Papa una imagen de la Virgen de los Llanos, patrona de la ciudad española de Albacete.
RM