En el vuelo de Roma a Budapest, Francisco saludó a los 73 periodistas provinientes de más de 10 países, entre ellos 8 de Hungría.
En los viajes anteriores, el Papa Francisco hizo que los periodistas se acercaran a su asiento para saludarles. Durante este vuelo, regresó a la tradición de saludar a cada uno en su asiento.
Muchos periodistas le llevaron regalos, como esta botella y esta brújula de la playa de Cutro (Italia). Hace dos meses, 200 personas murieron ahí tras el naufragio de un barco de migrantes.
Es una brújula que llevan siempre los refugiados cuando quieren atravesar el Mediterráneo. La verdad es que a mí me parece emocionante.
Hablando con un periodista de la agencia de noticias polaca PAP, el Papa calificó de 'tonterías' a las acusaciones sobre el Papa Juan Pablo II en el caso de Emanuela Orlandi.
Tras la ronda de saludos, el Papa Francisco bromeó con los periodistas acerca de los problemas técnicos que habían tenido con el micrófono al inicio del saludo.
Esto es como los niños caprichosos. Ahora ya me oyen. Buen viaje a todos. Gracias.
Al llegar a Hungría, el Papa Francisco utilizó un ascensor para bajar del avión. No utilizó su silla de ruedas, como lo había hecho en viajes anteriores. Pudo saludar a la multitud caminando con su bastón.
KG
TR: PA
