El Papa Francisco se reunió con el segundo grupo de obispos colombianos en visita ad limina. Es el primer grupo grande de este tipo que recibe tras su alta del hospital Gemelli de Roma. Vienen de las ciudades costeras de Colombia y le vieron muy bien de salud.
ARZ. FRANCISCO JAVIER MÚNERA
Arzobispo Cartagena de Indias, Colombia
Lo he visto excelente. Una lucidez espiritual, primero que todo, mental enorme.
Me sorprendió que nos haya dedicado dos horas y media. No le notamos ni cansancio ni fatiga. Como que se sentía muy vivo. Muy vital, esa es la palabra.
Francisco no habló de su salud y sus gestos y su estado de ánimo fueron señal suficiente para que los obispos colombianos comprendieran que, a sus 86 años, todo va bien a pesar de la infección respiratoria que sufrió antes de Semana Santa y de la que ya se ha recuperado.
ARZ. FRANCISCO JAVIER MÚNERA
Arzobispo Cartagena de Indias, Colombia
Y tampoco le preguntamos porque ver su rostro ya nos daba una tranquilidad enorme. Solo los pasos de un hombre anciano que tiene un problemita de rodilla. No más.
Las visitas ad limina son encuentros con obispos de un mismo país. Normalmente visitan varios dicasterios a lo largo de la semana y el viernes celebran una reunión con el Papa en la que tienen libertad para hablar de absolutamente todo.
RM